El monovolumen hizo su debut en los ochenta pero el proyecto que le inspiró es de una década anterior. El Kar-a-sutra del italiano Mario Bellini sentó las bases por una nueva gama de vehículos pensados para disfrutar y no solo para desplazarse.

Todavía no existe una maqueta a escala del Kar-a-sutra pero si existiera sería una de las más codiciadas por los coleccionistas. El proyecto del designer milanés era tan rompedor que nadie se habría atrevido a comercializar un vehículo de este tipo pero algunas de sus intuiciones eran destinadas a revolucionar la movilidad urbana. Desarrollado en colaboración con Pirelli y Citroën, este prototipo fue presentado en el MoMA de New York en 1972 en el seno de la la exposición Italy: the New Domestic Landscape. El antecesor del Renault Espace tenía un tamaño considerable, un hocico puntiagudo coronado por dos faros redondos, grandes ventanillas y un espacio interior con capacidad para seis personas. Entrevistado por la revista digital Designboom, Mario Bellini confiesa que después del estreno se esperaba la llamada de General Motors u otras compañías pero por aquél entonces el teléfono no sonó.

La génesis del Renault Espace

Por suerte, la idea del italiano fue retomada por los ingenieros de Matra, fabricante francés hoy desaparecido y que nos ha regalado modelos tan icónicos como el Bagheera. El primer prototipo se llamaba P16 y fue presentado a la directiva de Peugeot en 1978; tras el rechazo de la marca del león, los proyectistas intentaron con Renault que aceptó el reto modificando algunos detalles: nacía así el proyecto P23 que de allí a pocos años se habría convertido en la primera gama del Renault Espace.

En la foto de arriba podemos ver una miniatura a escala 1:43 que representa uno de los primeros ejemplares de la gama Renaul Espace. Siendo una reproducción del modelo de 1984 podemos apreciar todos los detalles que lo distinguen de sus sucesores como la forma más cuadrada de carrocería y faros (inclusive los característicos faros antiniebla) y la calandra de tres rayas que en la segunda versión será remplazada por una rejilla de ventilación más pequeña. También podemos ver los montantes de gran tamaño y los espartanos retrovisores que caracterizaban el primer llegado en casa Renault. En la versión de Norev no aparece el techo corredizo dado que este elemento fue añadido solamente en 1986.

Un prototipo muy atrevido

Uno de los coches a escala mas singulares es el Renault Espace F1 comercializado por Spark Model, Otto Mobile y otros fabricantes. El modelo original celebraba el décimo aniversario del monovolumen y estaba basado sobre un modelo de la segunda generación. La carrocería y el chasis en fibra de carbono lo hacían más ligero pero la verdadera diferencia con sus primos callejeros se encontraba bajo el capó; en efecto, el Espace F1 montaba un V10 del Renault-Williams FW15C, un motor que podía erogar más de 800 CV y que le permitía acelerar de 0 a 100 km/h en menos de tres segundos. La velocidad punta registrada en pista alcanzaba los 312 km/h pero pese a sus tremendas prestaciones el prototipo nunca pasó a producción. En la foto podemos apreciar todos los detalles de este modelo a escala 1:18 que reproduce fielmente los colores originales, el alerón trasero y las pegatinas deportivas.